El servicio eléctrico es necesario e imprescindible para lograr el desarrollo de un proyecto y llevarlo a cabo satisfactoriamente,pero como lograrlo con la ineficacia de las distribuidoras eléctricas que se encuentran casi ocultas al ser llamadas por la inversión privada.
Es el ejemplo del proyecto de la construcción del Hotel Royal Decameron en Punta Sal que pone al descubierto la debilidad que poseen las distribuidoras regionales eléctricas al dar este servicio.El problema es evidente, el abastecimiento no llega y si llega lo hace con deficiencias mostrados en los cortes de energía, lo cual implica el retraso del proyecto y pérdida de dinero.En defensa , Enrique García, gerente regional
de Electronoroeste dice :“Nosotros no podemos invertir y suministrar energía en proyectos que no sean concretos. Ya nos ha pasado que hemos hecho el tendido de energía hasta ciertas ubicaciones y no se ha hecho nada”.Otro obstáculo seria el complejo esquema de aprobación que tienen que pasar todas las inversiones de las empresas públicas de derecho privado.
Actualmente el Perú esta progresando y requiere de rapidez , eficacia y capacidad de reacción ante la demanda de los inversionistas.A causa de eso, la Fonafe señala que esto ya esta llevando a cabo a través del decreto legislativo 1031, que promueve la eficiencia de la actividad empresarial del estado.
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